¡E hijo!
Bueno, el hijo del hombre irónico viene a ser una especie de "Mini-yo". Me permite que aparezca el mismo personaje por duplicado pero teniendo uno de ellos una visión o una forma de actuar más inocente. Y aunque la mala leche, acidez o ironía del padre no la tiene el hijo, si es cierto que va adquiriendo la sutileza que tiene su padre, de ahí el comentario.




Publicado originalmente en Creatura #7